Con muchos años de actividad en el mundo de la hostelería, Alberto su propietario, ha conseguido aunar su cariño a la profesión con materias primas de calidad para ofrecer a sus clientes una cocina clásica y sabrosa. Desde las 12 de la mañana, dispone los vinos, cervezas, vermouth y refrescos, acompañados con pinchos de acuerdo a la temporada. Para comer, cuenta con dos comedores, con capacidad en uno de ellos de hasta 100 comensales, por lo que le convierten en el lugar especial para reuniones familiares y de amigos, así como las comidas y cenas. Todo se puede degustar en el local o para llevar. Se puede recoger en el local o si lo prefieren se las llevan a casa (servicio Just Eat)